La pandemia de COVID-19 tiene efectos sobre la vida humana que apenas dimensionamos y que siguen produciéndose. Este trabajo trata de las afectaciones en la educación escolar, promediando el segundo año escolar en pandemia. Propone cuatro reflexiones sobre la experiencia que está teniendo lugar: la experiencia de la desazón, en tanto no se vislumbra un cambio en las condiciones sociohistóricas que generaron esta tragedia; la alteración de la escolaridad, que no es solo de la presencialidad sino del conjunto de supuestos que estructuran la forma escolar; el problema didáctico que plantea la escolaridad combinada; finalmente, un interrogante sobre el futuro de la escuela, la duda sobre si las alteraciones constituyen una experiencia transitoria de este tiempo o si la invención del hacer que está teniendo lugar, trae una promesa de cambio escolar.
The COVID-19 pandemic has effects on human life that we barely appreciate and that continue to occur. This work deals with the effects on school education, averaging the second school year in the pandemic. It proposes four reflections on the experience that is taking place: the experience of unease, as there is no glimpse of a change in the socio-historical conditions that generated this tragedy; the alteration of schooling, which is not only in-person but in the set of assumptions that structure the school form; the didactic problem posed by combined schooling; Finally, a question about the future of the school, the doubt about whether the alterations constitute a transitory experience of this time or if the invention of doing that is taking place brings a promise of school change.